Agarro la pequeña nota y se me vienen tantos recuerdos a la
mente. Es una pequeña foto de mi familia donde estamos juntos y hasta abajo hay
un pequeño texto "Creemos en ti sabemos que volverás" caigo a mi cama
sin fuerzas presionando aquella pequeña foto contra mi corazón aferrándome solo
a mis recuerdos.
Luego de un rato alguien toca a mi puerta y yo en cuestión de segundos me pongo mis sandalias y salgo a la puerta para seguir al avox que me fue a buscar.
Al llegar a la mesa veo que todos ya han comenzado sin mí. Me disculpo por mi ausencia y me siento en la mesa, un avox llega con un plato lleno de comida. Con una taza de algo llamado chocolate caliente que es realmente delicioso. La primera en romper el silencio es Maggs.
- Bueno, no tenemos tiempo que perder alguno de ustedes tiene un talento oculto - pregunta y tras hacer un pequeño análisis respondo.
- No, lo siento pero no soy una profesional jamás he usado ni ninguna arma- respondo un poco avergonzada. Sin embargo me sorprende algo Finnick dice.
- Ella es buena con las redes para pescar podría ser buena en las trampas y además sabe algo de supervivencia
- Y tu en que eres bueno? - pregunta Maggs cariñosamente dirigiéndose a Peter.
- Puedo usar los cuchillos, no soy muy bueno pero mi padre me entreno un poco- la cara de ellos cambia un poco me imagino que creían que no era más que un niño asustado que salió en la cosecha pero no el si ha entrenado desde pequeño aunque no como los profesionales del distrito 1 o 2 pero su padre les enseño a él y a mi amiga a usar los cuchillos y una que otra trampa solo como una protección extra en caso de esta situación.
Incluso recuerdo que su padre siempre insistió en ayudarme a practicar y hablo con mis padres al respecto. Pero nunca fui buena en eso, a mis diez años recuerdo estar parada enfrente de un gran muñeco de práctica. Edward, el padre de mi amiga era prácticamente familia para mi así que yo sin pensarlo había aceptado la oferta de tomar algunas lecciones con el después de tanta insistencia. Mi amiga y Peter me animaban sentados en una banca del jardín. Edward en realidad se había esforzado para que me gustaran las clases puesto que me había entregado una pequeña espada con mi nombre grabado en azul en ella con un precioso dibujo de una estrella de mar. Era hermosa y me dijo que el solo no se llevaba el crédito sino que él y mi padre la habían escogido especialmente para mí. Corrí asía mi amiga a enseñarle y ella saco su arma que también era una espada con su nombre grabado pero su nombre era rosado con morado con un corazón y una pequeña flor. Todo parecía tan bueno e inocente que no se me paso por la mente que era lo que en realidad era. Kathy, mi amiga me enseño a como sostener mi espada y luego me dijeron que atacará. Lo pensé por un instante y lo intente pero me imagine haciéndolo realmente y me sentí realmente culpable. Lo único que pude hacer fue salir corriendo a esconderme del mundo. No me importaba que dentro de dos años fuera mi primera cosecha, no me importaba salir elegida lo único que me importaba era que JAMAS heriría a un ser humano. No importase si lo conociera o no o si el tenia otras intenciones el era un ser humano y tenía el mismo derecho de yo de vivir.
Claro pero ahora los tiempos son muy diferentes, yo soy la que tiene que luchar a vida o a muerte con el poco conocimiento de supervivencia que me había enseñado Edward (después de darse cuenta que las armas no eran lo mío). Y todavía me logro preguntar que a donde se ha ido ese pensamiento inocente que todos tienen derecho a vivir pero supongo al conocer o por lo menos tomar conciencia de quien era el Presidente Snow. Si exactamente el hombre que cree que su vida vale mucho más que la de todos esos niños que entran a la arena año tras año.
Maggs sigue con sus estrategias de cómo sobrevivir y espero que con la poca atención que he estado poniendo. Luego dice:
- vayan a dormir que les espera su primer día en el capitolio mañana.
Que? Tan rápido? Mañana es el desfile de presentación? Y allí caigo en la cuenta que yo solo soy una pieza de los juegos del capitolio
Luego de un rato alguien toca a mi puerta y yo en cuestión de segundos me pongo mis sandalias y salgo a la puerta para seguir al avox que me fue a buscar.
Al llegar a la mesa veo que todos ya han comenzado sin mí. Me disculpo por mi ausencia y me siento en la mesa, un avox llega con un plato lleno de comida. Con una taza de algo llamado chocolate caliente que es realmente delicioso. La primera en romper el silencio es Maggs.
- Bueno, no tenemos tiempo que perder alguno de ustedes tiene un talento oculto - pregunta y tras hacer un pequeño análisis respondo.
- No, lo siento pero no soy una profesional jamás he usado ni ninguna arma- respondo un poco avergonzada. Sin embargo me sorprende algo Finnick dice.
- Ella es buena con las redes para pescar podría ser buena en las trampas y además sabe algo de supervivencia
- Y tu en que eres bueno? - pregunta Maggs cariñosamente dirigiéndose a Peter.
- Puedo usar los cuchillos, no soy muy bueno pero mi padre me entreno un poco- la cara de ellos cambia un poco me imagino que creían que no era más que un niño asustado que salió en la cosecha pero no el si ha entrenado desde pequeño aunque no como los profesionales del distrito 1 o 2 pero su padre les enseño a él y a mi amiga a usar los cuchillos y una que otra trampa solo como una protección extra en caso de esta situación.
Incluso recuerdo que su padre siempre insistió en ayudarme a practicar y hablo con mis padres al respecto. Pero nunca fui buena en eso, a mis diez años recuerdo estar parada enfrente de un gran muñeco de práctica. Edward, el padre de mi amiga era prácticamente familia para mi así que yo sin pensarlo había aceptado la oferta de tomar algunas lecciones con el después de tanta insistencia. Mi amiga y Peter me animaban sentados en una banca del jardín. Edward en realidad se había esforzado para que me gustaran las clases puesto que me había entregado una pequeña espada con mi nombre grabado en azul en ella con un precioso dibujo de una estrella de mar. Era hermosa y me dijo que el solo no se llevaba el crédito sino que él y mi padre la habían escogido especialmente para mí. Corrí asía mi amiga a enseñarle y ella saco su arma que también era una espada con su nombre grabado pero su nombre era rosado con morado con un corazón y una pequeña flor. Todo parecía tan bueno e inocente que no se me paso por la mente que era lo que en realidad era. Kathy, mi amiga me enseño a como sostener mi espada y luego me dijeron que atacará. Lo pensé por un instante y lo intente pero me imagine haciéndolo realmente y me sentí realmente culpable. Lo único que pude hacer fue salir corriendo a esconderme del mundo. No me importaba que dentro de dos años fuera mi primera cosecha, no me importaba salir elegida lo único que me importaba era que JAMAS heriría a un ser humano. No importase si lo conociera o no o si el tenia otras intenciones el era un ser humano y tenía el mismo derecho de yo de vivir.
Claro pero ahora los tiempos son muy diferentes, yo soy la que tiene que luchar a vida o a muerte con el poco conocimiento de supervivencia que me había enseñado Edward (después de darse cuenta que las armas no eran lo mío). Y todavía me logro preguntar que a donde se ha ido ese pensamiento inocente que todos tienen derecho a vivir pero supongo al conocer o por lo menos tomar conciencia de quien era el Presidente Snow. Si exactamente el hombre que cree que su vida vale mucho más que la de todos esos niños que entran a la arena año tras año.
Maggs sigue con sus estrategias de cómo sobrevivir y espero que con la poca atención que he estado poniendo. Luego dice:
- vayan a dormir que les espera su primer día en el capitolio mañana.
Que? Tan rápido? Mañana es el desfile de presentación? Y allí caigo en la cuenta que yo solo soy una pieza de los juegos del capitolio
Solo una pieza... pobre Annie :(
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